2024-06-13

Mi hermano no quiere vender el piso de herencia

Cuando surge la situación de vender una propiedad heredada y uno de los herederos no
está de acuerdo, existen varias opciones para resolver el desacuerdo. A continuación, se
presenta un resumen más completo y amplio de estas alternativas:
1. Extinción de condominio: Consiste en que uno de los herederos compre la parte de
la propiedad que pertenece al heredero que no desea vender. En este caso, se
realiza un acuerdo entre los herederos donde se establece una compensación
económica por la parte vendida. Es importante tener en cuenta que esta opción
puede tener implicaciones fiscales. En general, el heredero que no se queda con la
propiedad debe tributar en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas
(IRPF) por la ganancia patrimonial obtenida. Sin embargo, no se aplicarían
impuestos como la plusvalía municipal o el impuesto de transmisiones
patrimoniales.
Si la propiedad heredada tiene una hipoteca, el heredero que se queda con la propiedad
deberá negociar con el banco una novación de la hipoteca para convertirse en el único
titular. Esto puede implicar demostrar solvencia y cumplir ciertos requisitos establecidos
por el banco.
2. Venta del proindiviso: Si la extinción de condominio no es viable, los herederos que
desean vender pueden vender su parte de la propiedad a una empresa o a un
tercero. Esta opción se conoce como venta del proindiviso y está respaldada por el
Código Civil. Sin embargo, es importante tener en cuenta que las empresas que
compran proindivisos suelen pagar precios inferiores al valor de mercado,
generalmente entre un 35% y un 50% menos. Además, los otros herederos tienen
derecho de tanteo, es decir, tienen prioridad para adquirir la parte de la propiedad
que se ofrece en venta.
La venta del proindiviso puede generar conflictos entre los herederos, ya que algunos
podrían sentirse incómodos compartiendo la propiedad con un desconocido.
3. División de la cosa común: Si no se llega a un acuerdo mediante las opciones
anteriores, se puede recurrir a la vía judicial y presentar una demanda de división
de la cosa común. En este caso, un juez podría ordenar la venta de la propiedad
en subasta pública y distribuir las ganancias obtenidas entre los copropietarios.
Sin embargo, la división de la cosa común puede tener desventajas significativas. Los
costos asociados pueden ser altos y el proceso puede ser largo, generalmente durando al
menos un año. Además, el precio de venta en subasta pública puede ser hasta un 30%

más bajo que el valor de mercado. Este tipo de procesos judiciales también pueden dañar
las relaciones familiares y generar tensiones adicionales entre los herederos.
En cualquier caso, es importante destacar que lo mejor es intentar llegar a un acuerdo
entre los herederos para evitar complicaciones y vender la propiedad al precio de
mercado. En algunos casos, una inmobiliaria puede actuar como intermediaria para ayudar
a los herederos a alcanzar un consenso y facilitar el proceso de venta. SI ninguna d estas
opciones valen ….siempre queda vender su parte de un proindiviso a una empresa
especializada en la compra de proindivisos o partes de herencias que hay en el mercado
Si uno de los herederos es menor de edad o tiene una incapacidad, se requerirá una
autorización judicial para vender la propiedad. En la solicitud de autorización, se deberá
demostrar que la venta busca garantizar las condiciones necesarias para el bienestar del
menor o de la persona con incapacidad, y se deberá detallar el destino de los fondos